jueves, 23 de diciembre de 2010

La muerte del Capitalismo,



Esta mañana Papá Noel conducía una funeraria llena de regalos. Creo que estaba algo perdido, y no quiero pensar qué pasará dentro de dos días.
La pregunta es, ¿y dónde andaba el muerto?


Todos sabemos que Sr. Capitalismo andaba un tanto enfermo desde hace cosa de dos años. Parece ser que, cogió un frío consumista de estos que se van gestando como en los niños chicos, hasta que le dio como un dolor de garganta y empezó a quejarse del Ibex 35 y de demás dolencias, pero ¡Ay!. Ya sabemos como anda la Seguridad Social.

Así que, Sr. Capitalismo siguió esperando, a que algún doctor le curara, le operara o le rezase a Lourdes. Pero nada de eso fue así.

Pasados los meses, Sr. Capitalismo perdió su trabajo tras la reforma laboral en la que le largaron con la cotización del tiempo mínimo. Sr. Capitalismo tenía millones de bolsillos que alimentar, pero nadie pareció escucharlo, no pudo ser, y así fue como, corrió a apuntarse a las listas del INEM, a cursillos de formación y a pedir – y llorar – por las esquinas.

Sr. Capitalismo se volvió algo vesánico después de varios meses de desocupación, de impago de alquileres, de deudas y de falta de ayudas. Sin poder alcanzar la jubilación que ya le tocaba, y sin poder alimentar(se) ni vivir a todo tren, propio de los de su clase, empezó a ver la vida desde abajo, o al menos a no mirar por encima del hombro; a ver la vida al modo proletario, con ciertas carencias y pesares, con metas y con ese cajón intocable de ahorros unidos al “por si acaso”.

El paro se le acababa, los bolsillos ya rascaban el fondo (y esque sus hijos no entienden de cosas de mayores), y las radiografías del Ibex no pintaban demasiado bien. A cosa de un mes antes de navidad Sr. Capitalismo comenzó a encontrarse débil y sostenido por diez o doce tipos gordos que ya no le daban tanto como en tiempos previos. “Cualquier tiempo póstumo fue mejor”, decía.

Y ahora le veías por la calle, como un cualquiera, con un trabajo mediocre y sinsentido, un tipo como él es mileurista, malviviente de ayudas sociales, él, quien antes era chupasangre, banquero, calienta sillas, vigilador de esquinas, desocupado, funcionario de altas mandaturas o como quiera que les llamen ahora, economistas, contador de perras, etc.

Había todo un campo para echarse a dormir pero alguien hizo un tremendo ruido y pum. La tormenta acababa de romper la zona del Business Neoyorkina. Fin del sueño americano. Menuda peste. Está en todas partes. Está hasta debajo de las piedras. Está en las mentes jóvenes y hará mucho daño, y Sr. Capitalismo lo sabía.

En resumen, hoy lo vi, por última vez. Dentro de un coche negro y alargado, no se. Tal vez le asesinaran esos tipos gordos, sus hijos. No se, es lo que suele pasar cuando ya no se tiene qué comer, que se hacen barbaridades.

Sr. Capitalismo no fue un gran tipo pero ha sido atrozmente traicionado, y ya sabemos todo lo que pasa cuando hay herencias de por medio. En sus tiempos jóvenes brillaba por sí solo, y su familia era feliz. Ahora vendrán las vacas flacas, cuando en realidad la gente ha dejado de comer esas cosas. así que no se descarta que, dos años más como éste y todos chupando piedras por culpa de unos cuantos.

Y que, al final el muerto les va a salir caro, porque esto no lo levantan ni con un recorte que ni Manostijeras, vaya.

viernes, 19 de noviembre de 2010

La sombra de Sir Ratzinger es alargada


Y el infierno se va a quedar pequeño


Tras la visita el 6 y 7 de noviembre de su Santidad el Papa Benedicto XVI a España, parece haberse recuperado la normalidad de nuevo: la gente vuelve a ser pasiva y borde, vuelven a producirse hurtos en las Ramblas, saqueos a los bolsillos obreros en las terrazas sobre el plato del día, vamos, lo normal. Todos volvemos a ser malos, y además… laicistas radicales.

Sí, sí. Y no parece haberse ido muy contento, la verdad, porque desde luego la que le prepararon no fue pequeña; la visita del Papa se vio eclipsada por todas las manifestaciones de protesta hacia su persona, y en lo referente al aforo, tampoco hizo demasiado, aunque al parecer los medios llevan dándose de tortas desde hace varios días aún sobre a ver quien se lleva el gato al agua.

De esta manera, la visita se vio oscurecida por una multitud de cientos de homosexuales dándose el lote, feministas exaltadas al paso del papa-móvil, una ingente masa de ateos, agnósticos y demás percal, indiferentes y revueltos, unido a las protestas contra el derecho de abortar de las madres, el abuso de menores por parte de los altos cargos eclesiásticos, reivindicación del uso de anticonceptivos… bah, poquita cosa.

No parece haber duda sobre los malos momentos por los que pasa la Iglesia Católica, a pesar de que la influencia del Papa sigue siendo muy fuerte debido a su poder como jefe espiritual, y todas esas cosas. Pero, tal como se presenta, esto va por mal camino; se aproxima un futuro bastante negro que discute sobre la posibilidad de otorgar más poder a estos cargos, lo cual podría conducirnos a un retroceso. Aunque parece ser que la sociedad no está por la labor: estamos en la delgada línea que puede marcar el antes y el después, como en las grandes revoluciones de la historia. ¿el camino abierto hacia un nuevo destape y sin censura? Será que estamos volviéndonos inmorales los españoles de hoy en día, o ¿demasiado cultos?, o ¿simplemente hoy podemos decidir cuántos hijos tener, en qué creer, y que abusar de niños está mal? Qué malos somos todos…

Y al parecer, la cosa trasciende a otras alturas. Varias cadenas de televisión han sido penalizadas de emisión, multadas, o simplemente las han dado un aviso tonto sobre lo que se llama “el respeto”, esa cuestión que cuando la fe habla y habla se les llena a todos la boca. La privatización de emisión y limitación de la expresión era lo último que nos quedaba por ver en este siglo. Nada, nada, que volvemos a los viejos tiempos… Aunque me da que como la Iglesia no se adapte, va a acabar hecha un Cristo.

Así que, ahora este hombre se ha ido considerando que los españoles somos unos pecadores laicistas agresivos como en tiempos de la Segunda República, unido al mosqueo de la pasividad que tuvo el jefe de Estado, pero en fin; aunque no se pueda hacerlo todo, primero es Dios que todos los Santos, y al parecer el Ratzinguer este se quedó a dos velas, escénicamente hablando.

Y esto no quiere decir que los españoles no seamos católicos; es que no estamos convencidos exactamente de la doctrina actual, la cual no se aclimata a las necesidades sociales. La labor de la Iglesia es algo que sostiene muchas vidas pero ya se sabe el dicho, a Dios rogando y con el mazo dando. Pues aquí ha pasado algo parecido. La mayoría no somos practicantes pero eso no supone que estemos de acuerdo en todas las decisiones papales. Si España hoy carece de fe es porque se la han quitado, entre el terrorismo, las armas nucleares, políticos, empresarios, ladrones del día a día; que el mundo no es fácil, y pueden decir misa pero la maldad ahí está.

Sólo hay que verla para poder borrarla, como ellos ven a Dios.
Y para eso, no vale cualquiera.

domingo, 3 de octubre de 2010

Con la puerta en las narices,


Más conocido como Plan Bolonia, la madre de la desinformación y el desorden.


Hoy vengo a quejarme, cruel y amargamente. Por todas las perrerías que estamos padeciendo a generación del 93 a manos del sistema educativo español. Y a los del futuro no parece pintarles mejor. Nosotros, aquellos quienes somos fruto de la LOE, la LOGSE y la madre que lo parió. Aquellos que ya no sabemos quienes somos, aquellos quienes antes de Bolonia teníamos una vida.

Como todos sabéis, ha habido una explosión de matriculaciones fuera de lista en todas las Universidades de España, y las carreras de notas de corte más bajas – no quiero desprestigiar con esto, solo indico hasta qué punto no funciona toda esta historia – han subido como la espuma elevando las medias, por ejemplo, de periodismo en el País Vasco, dos puntos por encima de la nota real.


Estuve el día de la publicación de listas de medicina con una amiga (la cual es la única de las pocas de la Comunidad que entró, olé) en la Universidad de Cantabria, donde se han dado de hostias en medicina a costa del novedoso sistema de los 14 puntos, hasta tal punto que gente con 9’7 se ha quedado en la puñetera calle y sentir que han fracasado en el sueño de sus vidas. Por lo que pude ver, les faltó que les dieran una patada en el culo, la verdad.


Así que, todos los que han podido se han largado a estudiar fuera, dejando aquí su familia, su novia y hasta el osito de peluche con el que dormían para pagar un pastonazo tremendo en Barcelona, Madrid, o en la Conchinchina.


Pero digamos que eso, ya se considera ya normal (recordemos el caso de la psicología, al cual yo le llamo “tengo ganas de cerrar el grifo”). Lo mejor viene veinte días más tarde cuando las notas se deshinchan de forma incomprensible, y la nota baja hasta el ocho con dos, y empieza a entrar todo el mundo a cascoporro…. Y empiezan a llamar a todos aquellos que ahora están perdidos por el mundo, y claro, qué van a hacer…


…pues qué demonios van a hacer: perder el dinero de los libros, la residencia, la matrícula de la universidad de la Conchinchina y el nuevo amor que se habían echado por allí. Oséase:

600 + 1500 x 9 + 1500, más o menos, y sin contar caprichitos ni medios de transporte…. La bromita de estos les ha salido un poco cara.


Pero además, han perdido 20 días de clase, irrecuperables en los cuales contaba la nota de prácticas y… comienzan suspensos (porque sí, ahora me han dicho que pasan lista y todo como a los niños pequeños, a ver si estás allí, o te has ido de calvas a jugar al mus, o simplemente tienes una resaca de caballo)

Resultado: se ha formado un pitote del uno, con movilizaciones estudiantiles, creación de asociaciones de alumnos de medicina, y vete a saber qué más.

Unido al mareo de la examinación oral de idiomas en la selectividad para nosotros los de Bachillerato, “que si este año no y el otro tampoco, pero no estoy seguro, chica”, me decía ayer el coordinador de toda la película, pues no se… ahora dicen que los de primero ya tienen reservada plaza en el purgatorio, pero cualquiera se fía ya.

Pues bien, en otro (des)orden de casos, ya no sólo hay follón en medicina y psicología; la cosa es está extendiendo a otras ramas en las que nunca había problemas para entrar porque eran los pringadillos de la Uni.

Yo simplemente había ido a preguntar ayer sobre los cambios en el Grado de Historia y de repente sin quererlo, creé todo un efecto dominó en la sala: un señor de una ventanilla de matador acento andaluz se levantó y le dijo algo a una chica que estaba en una silla de esas propia de funcionarios – lo cual me sorprendió aún más que aquella despegase el culo y fuera a su vez, a donde otra pava, la cual, VOLVIÓ A LEVANTARSE y llamó por teléfono… –

Y después de veinte minutos, viene el mismo tío diciéndome que no está seguro (“Ézque yo no zé ná, zi eso te lo consulto”, fueron sus palabras…) y que si puedo darle un correo, que me responderá en cosa de unos días…

… Si lo llego a saber, no le pregunto nada.

Así que, por lo que he llegado a deducir hasta ahora, mi bachiller actual de sociales les importa un pito porque ahora exigen Humanidades, y en fin… pondré ojitos a ver si el año que viene me cuelan porque no creo yo que tengan el derecho a ser tan escogidos, que Historia no va a estudiarla tanta gente, y sin gente, estos no comen.



mmmmm… una vez más, una reforma más, un intento más de arriesgarse a ser competitivos y seleccionadores en el trabajo, o cómo meterla hasta el fondo… como si los estudiantes se trataran de una cadena de montaje en la que el anterior tío no tiene ni idea de lo que hará el siguiente, ya que está tan preparado, tan especializado en lo suyo… panda de borregos.

Pero eso ya, es opinión de cada uno.

martes, 22 de junio de 2010

Literatura cronometrada

Es martes y estamos todos sobando (como de costumbre)
Entre unas partidas a los dados y que alguien toca el banjo reina la calma pantanesca digna de Tom Sawer.
De pronto como una exhalación entra el tutor.
-¡Todo el mundo a las mesas!
Como si lloviese.
-No, chicos, no hablo en broma ¡Esto es serio!
Nada
-¡El último que se siente se aprende las obras completas de Góngora!
Superando la velocidad de la luz nos sentamos y miramos al cansado tutor.
-¿Pasa algo?
-¿Qué si pasa? ¡Ya lo creo que pasa!
-¿Y eso es?
-¡Que vamos fatal de tiempo! Deberíamos haber empezado a dar materia hace dos semanas.
-Es que te empeñaste en repasar el análisis sintáctico.
-¡Me da igual, olvida el pasado, vivimos en el presente! Los libros pa fuera.
Todos los libros emergen de una pila de trastos que colapsan los cajones.
-Tema 4, Generación del 27.
-¿Qué es eso?
-¡Y yo que coño se! Venga, empezad a subrayar. Veamos, nanana, renovación cultural, nanana, época mas importante de la literatura, nanana… ¡Aja, aquí! Alexaindre, subrayar, “Gano el premio novel”
-¿Y?
-Siguiente autor.
-¿Solo hay que saberse que ganó el novel?
-¡Joder, esta muerto, da por saco, así que venga, Damaso Alonso. Hijos de la ira. Siguiente.
-¿Y de que va?
-¡Calla, que no oigo!
-Lorca, Romancero gitano, poeta en Nueva York y obras de la barraca.
-¿Ese no era homosexual y lo fusilaron por ello en la guerra civil? Creo que eso es importante.
-Mira que me has hecho perder 20 segundos de explicación.
-Mira, he estado pensando…
-¡La palabra Tabú!
-Si pero, hay algo que no encaja. ¿Cómo se pasó de 1700, que es lo último que estudiamos la evaluación pasada al imperio Inglés? ¿Dónde esta ahí Napoleón? ¿Qué fue la guerra de los 7 años?
-Míralo en Wikipedia, pero ahora subraya.
-Y a pesar de haber hecho dos exámenes de logaritmos sigo sin saber que son ni para que se usan.
-¡Son ejercicios y entran en evaluación, así que venga!
-Pero…
-De peros nada ¡Huy, el radar del techo dice que ahora vamos a menos de un tema por hora! ¡Nos has hecho perder velocidad!
Toda la clase me mira.
-¿No estamos aquí para aprender y tener unas bases culturales? Hay cientos de cosas que nos hemos saltado y que siempre he querido saber. Nunca hemos dado astronomía, ni sabemos quien fue Napoleón, ni quien inventó la imprenta, muchos de nosotros no saben si quiera quien fue el primer presidente español, ni hemos dedicado mas de cinco minutos a ver buen cine, ni si quiera sabemos para que hacemos las cosas en matemáticas. ¿No tenemos derecho a una educación que nos enseñe los valores mas importantes del ser humano y que no nos convierta en máquinas Standar que solo saben tirar de una palanca o dar a un botón? ¿No tenemos derecho la cultura?
Todos en silencio.
-Vale, escuchado al idiota, seguimos. Alberti, marinero en tierra.
-¿Y de que va?
-¡Que no lo se joder! ¿Tengo cara de saber de que estoy hablando?